Algo que Decir

jueves, abril 26, 2007

El rey Lear


Oh, no razonéis sobre la necesidad:

a nuestros más míseros mendigos

les sobra lo paupérrimo;

no concedáis a la naturaleza

más de lo que ella necesita:

la vida del hombre es tan barata

como la de los animales..


Shakespeare, El rey Lear
paupérrimo:adj. sup. de pobre, muy pobre
mísero: adj. Desdichado,infeliz:¡ay,mísero de mí! / De escasa cuantía o valor:mísera propina. / adj. y com. Avariento,mezquino.

domingo, abril 22, 2007

La Sombra

Por supuesto que en la teoría junguiana también hay espacio para el sexo y los instintos. Éstos forman parte de un arquetipo llamado la sombra. Deriva de un pasado pre-humano y animal, cuando nuestras preocupaciones se limitaban a sobrevivir y a la reproducción, y cuando no éramos conscientes de nosotros como sujetos.

Sería el “lado oscuro” del Yo (del sí mismo. N.T.) y nuestra parte negativa o diabólica también se encuentra en este espacio. Esto supone que la sombra es amoral; ni buena ni mala, como en los animales. Un animal es capaz de cuidar calurosamente de su prole, al tiempo que puede ser un asesino implacable para obtener comida. Pero él no escoge ninguno de ellos. Simplemente hace lo que hace. Es “inocente”. Pero desde nuestra perspectiva humana, el mundo animal nos parece brutal, inhumano; por lo que la sombra se vuelve algo relacionado con un “basurero” de aquellas partes de nosotros que no queremos admitir.

Los símbolos de la sombra incluyen la serpiente (como en el Jardín del Edén), el dragón, los monstruos y demonios. Usualmente guarda la entrada a una cueva o a una piscina de agua, que representarían el inconsciente colectivo. La siguiente vez que sueñen que se están peleando con un luchador fortísimo, puede que simplemente ¡se esté peleando con usted mismo!.

http://www.psicologia-online.com/ebooks/personalidad/jung.htm